Dermatitis atópica: ¿Qué es?
Una de las razones que me han llevado a abrir este blog es poder ayudar a personas que como yo, un día se enfrentan a un diagnóstico denominado dermatitis atópica y no saben qué hacer con él.
Es una enfermedad de la piel crónica, incurable, no contagiosa, puede ser hereditaria y si te toca te hace bien la puñeta. Yo tengo la sensación de que no es suficientemente conocida o al menos sus síntomás y tratamientos no lo son. Cuando esta en una fase de cierta gravedad hay medicamentos que la controlan y neutralizan. Pero ¿Que ocurre en esos momentos intermedios en que la piel no está bien pero tampoco hemos llegado al brote?
Aunque no se hable mucho de ello durante muchos años se pensó que el picor era una forma de dolor de baja intensidad y aunque ahora parece que se opina de otra forma no es una sensación agradable cuando se experimenta y menos de forma generalizada como puede ocurrirnos a los que tenemos enfermedades de la piel.
Aún no sabe la causa directa aunque se cree que hay cierta predisposcion génetica a padecerla. Es decir, si existen antecedentes familiares seremos muchos más propensos a padecerla.
Los síntomas más típicos son:
Es importante que sea diagnosticada por un médico de forma adecuada ya que debido a sus manifestaciones físicas puede llegar a confundirse con otras enfermedades de la piel que resultan muy parecidas como la psoriasis o la rosácea. Y cuyo tratamiento puede difererir.
Tambien me parece importante que aunque nos informemos en la red sobre tramientos médicos no seamos nosotros mismos quienes decidamos comprar cremas medicamentosas de motu propio. Hay muchisímos tipos con sustancias parecidas y suelen ser a base de corticoides. Estos no son ningún juego y su empleo inadecuado puede llevarnos a tener más perjuicios que beneficios. Depende de la formulación harán un efecto u otro o serán más indicadas para una parte del cuerpo u otra. Aunque se venden sin receta siempre debe ser un médico quien paute su uso.
Es una enferemedad que solo está cubierta la parte digamos más crítica pero hay un trabajo importante que en los periodos en los que no sufrimos brotes podemos trabajar nosotros y minorarlos e incluso evitarlo. Con cosas tan sencillas como la ropa, una buena y adecuada higiene con productos no agresivos y una hidratación que haga sentir confortable a nuestra piel.
En la próxima entrada os hablaré de cómo la he vivido yo desde que la sufro.
Gracias por leerme
Es una enfermedad de la piel crónica, incurable, no contagiosa, puede ser hereditaria y si te toca te hace bien la puñeta. Yo tengo la sensación de que no es suficientemente conocida o al menos sus síntomás y tratamientos no lo son. Cuando esta en una fase de cierta gravedad hay medicamentos que la controlan y neutralizan. Pero ¿Que ocurre en esos momentos intermedios en que la piel no está bien pero tampoco hemos llegado al brote?
Aunque no se hable mucho de ello durante muchos años se pensó que el picor era una forma de dolor de baja intensidad y aunque ahora parece que se opina de otra forma no es una sensación agradable cuando se experimenta y menos de forma generalizada como puede ocurrirnos a los que tenemos enfermedades de la piel.
Aún no sabe la causa directa aunque se cree que hay cierta predisposcion génetica a padecerla. Es decir, si existen antecedentes familiares seremos muchos más propensos a padecerla.
Los síntomas más típicos son:
- Prurito o picor, que puede llegar a ser insoportable
- Ezcemas, que pueden ser rojeces, descamaciones o incluso heridas
- En ciertas ocasiones, se sufre a la vez y esta relacionado con el asma o alergias (ambientales o alimenticias).
Es importante que sea diagnosticada por un médico de forma adecuada ya que debido a sus manifestaciones físicas puede llegar a confundirse con otras enfermedades de la piel que resultan muy parecidas como la psoriasis o la rosácea. Y cuyo tratamiento puede difererir.
Tambien me parece importante que aunque nos informemos en la red sobre tramientos médicos no seamos nosotros mismos quienes decidamos comprar cremas medicamentosas de motu propio. Hay muchisímos tipos con sustancias parecidas y suelen ser a base de corticoides. Estos no son ningún juego y su empleo inadecuado puede llevarnos a tener más perjuicios que beneficios. Depende de la formulación harán un efecto u otro o serán más indicadas para una parte del cuerpo u otra. Aunque se venden sin receta siempre debe ser un médico quien paute su uso.
Es una enferemedad que solo está cubierta la parte digamos más crítica pero hay un trabajo importante que en los periodos en los que no sufrimos brotes podemos trabajar nosotros y minorarlos e incluso evitarlo. Con cosas tan sencillas como la ropa, una buena y adecuada higiene con productos no agresivos y una hidratación que haga sentir confortable a nuestra piel.
En la próxima entrada os hablaré de cómo la he vivido yo desde que la sufro.
Gracias por leerme
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